Esta mañana… qué bien hemos dormido los que nos quedamos en el hotel… Me temo, en cambio, que los que se fueron al vivac no durmieron demasiado. Al menos, no todos…
Como decía, esta mañana no demasiado tarde, nuestros campistas emprendieron la marcha hacia la laguna del Poyato, donde estuvieron un buen rato disfrutando de las piraguas y otras cosas.
Después, vuelta al Refugio para comer y descansar un poco, antes de una tarde intensa de ensayos a la que nuestros chicos se comprometieron a cambio de hacer el vivac. Y han cumplido, y con creces.
Además, hemos contado con la inestimable ayuda de Pili, que ha venido a hacernos una visita y que es actriz, por lo que nos ha dado montones de buenos consejos para nuestra interpretación que sale cada día mejor.
Tan bien se han portado, que Paco ha regalado una gominola a cada alumno por el buen comportamiento y el esfuerzo realizado.
Después cena y, aunque algunos valientes querían velada, la mayoría se estaban quedando dormidos en la silla…
Así que ya los tenemos en las habitaciones y, esperemos que puedan y quieran descansar bien, porque mañana será un día largo y con mucho trabajo.
¡No queda nada!
Qué emoción…
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