Terminamos la primera semana en MusikalSol 2014 cumpliendo los objetivos que nos marcamos al empezarla: guión terminado, música elegida y arreglada, escenografía y vestuario pensado y mucha complicidad para afrontar la segunda semana a tope.
Empezamos por la mañana con las niñas despiertas y vestidas antes de que Rafa llegara a despertarlas; se ve que el haberse acostado un poco antes ayer ha servido para que todos descansen mejor. Después del desayuno, ensayos por grupos y continuación del guión. Las canciones empiezan a sonar de lujo, los instrumentistas practican y practican. ¡Esto suena! Es emocionante ver el proceso, la verdad…
Después, juegos divertidísimos en la piscina, con cucharas, huevos (o bolas de ping pong en este caso), carreras en cuclillas… ¿no os suena?
Después de la riquísima comida, tiempo libre. ¿Y sabéis qué? Sonaban los instrumentos en ese rato y también la puerta de nuestra habitación, pidiendo partituras para poder tocar. ¡Nuestros pequeños músicos están desatados!
La clase de música de la tarde ha servido para terminar el guión, con un gran aplauso por la satisfacción de ver el trabajo cumplido y más ensayos seccionales practicando aquí y allá, esto y aquello.
Con Diego, un plato fuerte después: ¡quads! Sí, ya sabéis, esas motos de cuatro ruedas que tan de moda están. Evidentemente, adaptadas al tamaño y edad de nuestros participantes. Aún así, han gozado de lo lindo. ¡Todos querían repetir!
Después ducha y, ¡sí! nuevamente al aula de música a tocar. Y a pedir arreglos y colaboraciones.
Por último, la cena ha sido tranquila y deliciosa y ahora los tenemos jugando a “Furor” con Diego, sacando el alma de cantantes que llevan dentro.
Mañana día libre de música. Tienen prevista una gran caminata con Diego y alguna cosa más… Ya nos contarán.
MusikalSol 
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