Tercer año de este maravilloso proyecto que iniciamos con el entusiasmo que producen las cosas que nos gustan.
Y comenzó, sí. A las 9 de la mañana para no perder el día, primera parada en Las Matas, yendo rumbo a Madrid después y a Somolinos finalmente. Lo bueno de viajar en domingo es que esta vez hemos tenido muy poquito tráfico, así que hemos venido como la seda. En el autobús un olvido: ¡la película! Nos ha tocado, pues, la banda sonora minimalista más conocida por todos: “¿cuánto faaaaalta?”.
Ya en la Casona, recibimiento por parte de todo el equipo de Molingordo y reparto de habitaciones. De momento hay mayoría de chicas y las tenemos encantadas, aunque van llegando refuerzos de chicos poco a poco.
Una vez instalados, hemos empezado la visita por las instalaciones y estando en el comedor ha aparecido Diego, nuestro monitor, así que hemos continuado la visita con él. Una vez vista la Casona, hemos paseado por las extensísimas instalaciones que aquí tenemos y hemos conocidos a algunos amigos que nos acompañarán estas dos semanas. Nuestros chicos estaban encantados con Paquita.
Después la comida; ¡riquísima! Macarrones con tomate, pollo al ajillo y ensalada. Y para terminar, melón.
Han tenido un rato de tiempo libre con Diego y a las 15h hemos hecho nuestra primera reunión para conocernos y plantearnos cómo vamos a hacer nuestra obra de teatro musical. Ana León (¡tenemos cuatro Anas este año!) y Germán, los veteranos del grupo, han explicado a sus compañeros en qué consistía nuestro objetivo y cómo podremos lograrlo. Después, una pequeña “lluvia de ideas” como diría Germán, y una mínima demostración de lo que cada uno sabe hacer con su instrumento.
¡Y a la piscina! Hoy, con tantas emociones como hemos tenido y un sol espectacular sobre nosotros nos ha parecido una gran idea.
Después del baño, una duchita y nueva reunión con montones de ideas para nuestro teatro. Parece que nuestros chicos han sido capaces de aprovechar el tiempo de la piscina para madurar algunas propuestas y… ¡esto está empezando a tomar forma!
Tras la cena, muy tranquila, han salido a hacer la velada y han jugado a «fuga» y al «escondite al revés». Ahora están ya acostados.
Deja una respuesta